Placas en monumentos

Opakua
Bilbao (Euskadi)
España

Consulta los paneles informativos OPAKUA

Las placas en monumentos son elementos indispensables para denotar a quien se le dedicó o cuál es la conmemoración que se rinde con la estatua u obra de arte en cuestión. Por lo general, están al pie del mismo o en un monolito adyacente en el cual la gente pueda leer la información de manera concisa y sin ambigüedades.

Las placas conmemorativas suelen fabricarse con materiales no ferrosos. Es decir, metálicas, pero no con aleaciones de hierro. Para ellas se emplea más el bronce, el aluminio o diversas mezclas para hacerlas atractivas, duraderas y resistentes.

Se elaboran con las técnicas de fundición convencionales en empresas metalúrgicas y se utilizan como forma tangible de e pública una manifestación de reconocimiento para personas o causas que la gente quiere que se recuerde para siempre.

El tiempo, el coste y el acabado de las placas conmemorativas ha ido variando a lo largo de la historia y hoy son más baratas y están disponibles en diversos e innovadores materiales. Además, admiten grandes y sofisticado artes con softwares como el denominado CAD (dibujo asistido por ordenador) y el CAM (fabricación asistida por ordenador). Todo esto da como resultado final y un acabado más exquisito, personalizado y acorde a cada necesidad.

De igual manera, hay otro material noble y natural con el que se suelen hacer las placas en monumentos. Se trata de la piedra esmaltada, cuyo uso es de corta data, pero que ha demostrado ser muy eficaz, duradera y mucho más atractiva que el metal porque se le puede imprimir colores, imágenes, textos y hacer uso de cualquier recurso que los diseñadores gráficos deseen.

Placas en monumentos: ¿qué son exactamente?

Las placas conmemorativas que suelen ponerse cerca de los monumentos son señalizaciones permanentes en lugares que cuenten con un especial valor cultural, patrimonial, científico, geográfico o histórico y en zonas que son visibles para el público.

Por ello se colocan en edificios, sitios históricos, arqueológicos, parques naturales y, por supuesto, monumentos alegóricos a algún personaje notable o alguna causa en especial. Muchas placas, a las cuales se les llama también, marcadores contemporáneos identifican el lugar como un destino turístico o de interés digno al relacionarlo con alguna persona, una fecha u ocasión o un determinado hecho acaecido en el emplazamiento en cuestión y que se erige para que se recuerde.

Casi siempre están adosadas a elementos escultóricos, diversos tipos de edificios u otros espacios. Las mismas dan cuenta directa y clara de su origen. Sin embargo, estas pueden estar instaladas en un lugar diferente, pero evocando  un hecho, una acción o reconociendo un personaje allende de sus fronteras.

Esto significa que puede haber placas en monumentos o conmemorativas que están desvinculadas por completo del lugar que honran. Un ejemplo de esto es la estatua a Mahatma Gandhi que se encuentra en la ciudad de Washington y que honra al político y filósofo indio como símbolo de la paz.

Ahora bien, ¿qué se debe escribir en ellas? Encontrar las palabras o frases perfectas para colocar en las placas no es tarea sencilla. Estas deben honrar, recordar y ofrecer respeto a las personas, hechos o acciones de una manera respetuosa, pero a la vez llamativa y sencilla para que el mensaje sea entendido por todos.

Placas en monumentos: ¿qué debe tener?

Cada mensaje tiene que ser el idóneo para cada caso. No es lo mismo las Placas en monumentos que se erigen en reconocimiento a una persona como la que tiene Charles Chaplin en Londres a la que reposa en la playa de Normandía en la que los aliados desembarcaron durante la II Guerra Mundial para frenar el avance nazi.

En cualquier caso se trata de usar un tono que debe ser apropiado para el destinatario o aquello que se honra. Las maneras de dedicar las placas y los mensajes que transmiten poder ser infinitos. No obstante, indistintamente de cada caso, se debe considerar la razón de ser por la cual se rinde el homenaje, la ocasión concreta y los datos adicionales pertinentes que hagan posible entender la idea o concepto de la conmemoración. Los ilustradores suelen ser quienes se encargan de conjugar texto e imágenes en este tipo de anuncios.

Estos textos, por supuesto, son totalmente personalizables y sirven para adaptarse a cualquier situación. La clave, asimismo, es tener siempre en cuenta los siguientes factores:

1.- El trato del homenajeado o de la situación específica. Es decir, que puede ser más o menos formal o informal dependiendo de la cercanía o confianza en la cual se desenvuelva el hecho o la proximidad del personaje.

2.- Se puede grabar, junto al texto, una imagen importante o representativa del caso en particular.

3.- El motivo por el cual se rinde el reconocimiento.

4.- En caso de personas debe incluirse nacimiento, muerte (si aplica) y los acontecimiento pertinentes y cuándo ocurrieron. Las fechas que deban ser mencionadas a colación.

5.- La fecha y lugar del acto inaugural de la remembranza.

6.- Quién otorga o hace el reconocimiento o el organismo e institución que lo lleva a cabo.

¿Cómo se hacen las placas en monumentos: ¿qué debe tener?

Como se dijo las placas en monumentos de cualquier tipo pueden ser de bronce o aluminio. También es posible usar piedra o roca esmaltada. Esta se imprima una capa base (en una primera capa) mediante serigrafía manual y a altas temperaturas para que los pigmentos se fijen.

Tras esto se vuelve a usar la técnica de serigrafía, pero con el arte final o texto y se vuelve a someter a cocción. Se obtiene, entonces, un acabado brillante y duradero. La placa de piedra esmaltada no necesita ningún tipo de soporte y puede instalarse en el suelo cerca del monumento o en una pared cercana.

Se suele utilizar roca con un grosor de entre 15 y 25 milímetros, dependiendo de casa caso. Este es el único material que puede tolerar una exposición prolongada al sol, que es resistente a los rayos UV, a condiciones climáticas adversas y variables durante todas las estaciones del año como el frío intenso de las nevadas y no sufre corrosión en situaciones de viento o humedad arena y sal.

De igual manera, puede utilizarse en entornos metropolitanos que están expuestos a la contaminación de los coches o en sitios naturales y al aire libre. También soporta rayones o intento de vandalismo.

Foto: Placas en monumentos

Consulta los paneles informativos OPAKUA